Eden Hazard, quien anunció su retiro en octubre de 2023 a los 32 años, ha ofrecido una perspectiva poco habitual sobre su paso por equipos de élite y su relación con figuras destacadas del fútbol europeo. El jugador belga apareció en el foco de los mejores equipos internacional cuando portaba la camiseta del Chelsea. Con los Blues brilló con luz propia, desmarcándose como uno de los mejores jugadores del momento. Una actuación que llevó a varios clubes a plantar una oferta sobre la mesa, entre ellos al Real Madrid. Finalmente, Hazard decidió aceptar y se vistió de blanco. Ahora ha hablado sobre su etapa en Chamartín y sobre los grandes jugadores con los que partió vestuario a lo largo de su carrera profesional.
En una reciente intervención en el pódcast de Zack Nani, el exjugador belga abordó cómo vivió su convivencia profesional con Thibaut Courtois y Karim Benzema, dos nombres fundamentales en su trayectoria tanto en clubes como en la selección nacional. Hazard relató que, a lo largo de su carrera, Courtois, con quien coincidió en el Chelsea, el Real Madrid y la selección de Bélgica, solía mostrar una preferencia clara por otros compañeros. “Courtois siempre ponía a jugadores como Benzema y Modric por encima de mí”, afirmó el exfutbolista, aludiendo a la jerarquía y admiración que el guardameta sentía por el delantero francés y el mediocampista croata.
En su repaso por los años compartidos con Benzema, Hazard destacó la buena relación personal y profesional que mantuvieron. “Karim fue genial desde el primer día. Hablamos y jugamos juntos. Creo que está decepcionado por cómo sucedieron las cosas, pero siempre tenemos buena relación”, señaló, dejando entrever una conexión sólida pese a las circunstancias deportivas que marcaron su etapa en el Real Madrid.
El papel de Hazard en el Real Madrid
El exjugador también reconoció el papel determinante que tanto Courtois como Benzema desempeñaron en la conquista de la Champions League. “Los que nos hicieron ganar la Champions fueron Thibaut y Karim”, admitió, situando a ambos como piezas clave en el éxito europeo del club blanco. Hazard, por su parte, reivindicó su contribución desde un ángulo menos visible: “Y yo aporté a la atmósfera del grupo. Eso la gente no lo ve, pero es importante. Ese año fue impresionante”. Con estas palabras, subrayó la relevancia de la cohesión y el ambiente en el vestuario como factores decisivos en los logros colectivos.
Al profundizar en su propio desempeño, Hazard mostró autocrítica respecto a su implicación defensiva, un aspecto que, según él, comparte con otros grandes atacantes. “Los buenos jugadores ofensivos a veces boicotean los esfuerzos defensivos. Yo soy uno de ellos. He jugado con Karim Benzema y te puedo decir que él tampoco siempre hace todos los esfuerzos físicos”, reflexionó, reconociendo que el talento ofensivo suele ir acompañado de ciertas limitaciones en tareas de sacrificio. La visión honesta de Hazard sobre su carrera y sus compañeros revela los matices que definen la vida en la élite del fútbol, donde el brillo individual se equilibra con la autocrítica y la importancia de la armonía grupal.