Los tiempos cambian para todos y La Libertad Avanza no es ajena a eso. Los vientos de novedad dejaron de soplar, la paciencia se fue apagando y llegó el momento en el que los triunfos se convierten en derrotas. Por lo menos en la Cámara de Diputados.
Durante el 2024 el oficialismo logró aprobar la Ley Bases y el paquete de Medidas Fiscales. Todo en el primer semestre del año. A eso le sumó los apoyos suficientes en la Cámara de Diputados para blindar los vetos presidenciales a las dos leyes más relevantes para la oposición, que fueron el financiamiento universitario y el alza de las jubilaciones.
Un año más tarde, con un Presidente que mantiene altos índices de popularidad, esos acuerdos y triunfos se diluyeron y el oficialismo tuvo que cambiar de estrategia, apuntando a una que implique un menor ritmo del debate y, si eso no se puede, una paralización total.
Esto quedó claro durante el primer semestre de este año, en donde La Libertad Avanza hizo todo lo posible por clausurar el recinto frente a una avanzada opositora. Entre el 1 de marzo y el 18 de julio los diputados debatieron -sin contar las visitas del Jefe de Gabinete y la apertura de sesiones- en solo 5 oportunidades. Y en 4 sufrió derrotas.
El año comenzó con un fuerte tropezón cuyas consecuencias aún no están claras. La oposición abrió el recinto por primera vez el 12 de marzo para debatir una decena de proyectos relacionados con el escándalo de las criptomonedas protagonizado por Javier Milei el 14 de febrero pasado. Como todos los proyectos no tenían dictamen, se votó emplazar el tratamiento en las comisiones. La sesión terminó en escándalo con el diputado Oscar Zago del MID a las piñas con el libertario Lisandro Almirón.
En la previa, Unión por la Patria lograba media sanción por unanimidad respecto de la declaración de emergencia en Bahía Blanca.
Los libertarios daban muestra de recuperación a la semana siguiente y lograban en el recinto una importante victoria. Reviviendo los acuerdos con los radicales, algunos gobernadores –Catamarca, Tucumán, Salta y Misiones– el oficialismo logró blindar el Decreto de Necesidad y Urgencia con el que cerró el acuerdo con Fondo Monetario Internacional.
Pero desde esa fecha La Libertad Avanza encadenó derrotas y las veces que logró imponer su posición solo logró ganar tiempo, como sucede con el bloqueo de la Comisión $Libra y el cierre de la Comisión de Presupuesto y Hacienda. En el caso del cierre de las comisiones, la respuesta es en el recinto mediante emplazamientos y con la criptomoneda vía los movimientos judiciales en los Estados Unidos.
A partir de ese momento fue todo pérdidas. El 8 de abril la oposición volvió a sesionar y avanzó con una serie de emplazamientos para tratar la suba de 7,2% de las jubilaciones, la suba del bono y la vuelta de la moratoria. También se emplazó para tratar la emergencia en discapacidad, un pedido de informes al Ejecutivo sobre el estado de situación de la obra pública y la puesta en marcha de la comisión $Libra sin autoridades.
Un mes más tarde, el 4 de junio, la oposición juntaba el quórum y llevaba al recinto el tratamiento de ese paquete de leyes. Y obtenía media sanción. Pero no solo eso, sino que daba aprobación definitiva al proyecto de ley de emergencia para Bahía Blanca que llegaba con media sanción del Senado.
El oficialismo mostraba la debilidad en esta sesión, ya que buena parte de los diputados de otros bloques que hasta ahora no habían mostrado fisuras se desmarcaron. En algunos casos se abstuvieron, en otros se ausentaron y hasta votaron a favor, como fue la emergencia para la ciudad bonaerense.
La estrategia libertaria de frenar todo tipo de tratamiento sufrió frente al avance de una nueva mayoría de la mano de Unión por la Patria, Democracia, Encuentro Federal, la Izquierda y la Coalición Cívica que, dependiendo del tema, se fueron sumando a un bloque opositor que logró romper el cerco libertario.
La última sesión del semestre fue el pasado 2 de julio en donde este grupo de bloques logró un nuevo emplazamiento a la comisión de Presupuesto, Educación y Familia y Niñez para alcanzar dictamen en los proyectos de ley de financiamiento de las universidades nacionales y de Emergencia en Pediatría en donde también se establece fondos para el Hospital Garrahan. Seis días más tarde, la oposición alcanzaba el dictamen y dejaba los proyectos listos para ser debatidos en el recinto, algo que seguramente pasará apenas culmine el receso de invierno.
En medio de lo que será la campaña electoral para las elecciones en la provincia de Buenos Aires La Libertad Avanza deberá enfrentar la insistencia en Diputados por la emergencia para Bahía Blanca, que si se aprueba se convierte en ley; y los proyectos que impulsan la totalidad de los gobernadores que, si no hay un acuerdo en los próximos días, significará una nueva derrota para el oficialismo en la Cámara baja.
El escenario para el segundo semestre es bastante incierto para LLA en Diputados. Los referentes de los bloques de la oposición ya no confían en el presidente de la Cámara, Martín Menem, a quien le recriminan un tratamiento discrecional y una falta de palabra en los compromisos asumidos en las conversaciones reservadas.
La estrategia libertaria parece cimentada en “aguantar” y “estirar” a la espera del 10 de diciembre, cuando cambie la composición y aumente la cantidad de diputados libertarios -sólo pone en juego 8 bancas-. Lo que queda claro es que los triunfos del 2024 que permitieron que, sin mayoría, Javier Milei lograra la Ley Bases, la reforma fiscal, la delegación de facultades, la restitución del impuesto a las Ganancias para la cuarta categoría y cambios en el impuesto sobre Bienes Personales, dos vetos y el RIGI, quedaron lejos y el segundo semestre de 2025 podría ser peor.